Hemos dedicado un montón de tiempo a la celebración de la cena y la fiesta de Halloween, pero no debemos olvidar que por estas fechas también se disfrutan tradiciones muy de nuestra tierra. Es el caso de los postres típicos de España en los alrededores del Día de los Santos.
Quizá los más consumidos sean los Huesos de Santos, los Buñuelos y los Panellets. Todos ellos están deliciosos, pero tal vez el más extendido por toda la geografía sea el clásico huesito de santo. Por lo menos a mí me recuerdan a mi madre quien, desde mi más tierna infancia y a finales de octubre, siempre tiene en la cocina unos cuantos huesitos de yema.
Ingredientes para la receta de Huesos de Santo:
(Mazapán)
- 100 gramos de agua
- 150 gramos de almendras molidas
- 200 gramos de azúcar
(Relleno de yema)
- 50 gramos de agua
- 100 gramos de azúcar
- 4 yemas de huevo
Primero deberemos elaborar un almíbar muy consistente, para ello pondremos al fuego el agua y el azúcar. Cuando esté listo añadiremos las almendras molidas, removiendo enérgicamente hasta que se forme una pasta que dejaremos enfriar.
Mientras nos pondremos manos a la obra con el relleno y de nuevo nos toca hacer el almíbar con el agua y el azúcar que hemos reservado para ello.
Batimos las yemas de huevo, sin clara. A continuación le vamos añadiendo el almíbar sin dejar de remover. Es el momento de poner la crema al baño maría. Es muy importante que no dejemos remover en ningún momento y que esperemos a que la crema esté espesa, aunque no podemos permitir que hierva, para que no se corte. Dejamos que se enfríe.
Es el momento de amasar la pasta de mazapán que hicimos al principio. La estiramos con el rodillo de cocina, sobre una superficie bien limpia y espolvoreada de azúcar glaseada, para que no se pegue. Cuando la masa esté bien fina, la cortamos en tiras de cuatro centímetros de ancho y luego cada tira la separamos en cuadraditos de un centímetro.
Cada uno de los cuadradito deberá ser enrollado alrededor de un palito de un centímetro de diámetro, sirve por ejemplo el mango de una cuchara de madera. Pegamos los bordes de la masa, pasamos por azúcar glaseada y sacamos el palito. Sólo nos queda rellenar los canutillos con la crema.
Imagen: Flickr/Fernand0