De nuevo, he de decir que lo sencillo y lo fácil es lo más efectivo a la hora de quedar bien delante de nuestro invitados, ya que en ocasiones nos complicamos mucho la vida y el plato puede que no nos quede del todo bien. Como primer plato lo ideal siempre es algo de ensalada, algo suave para poder meter el segundo plato, que suele ser más pesado, en el menú y que quede completamente a la perfección.
Los ingredientes que solemos utilizar en las ensaladas suelen ser siempre los mismos, por lo que no está mal, de cuando en cuando, idear una nueva receta que seguro que triunfará entre nuestros comensales. La ensalada lo admite todo, desde el queso de cabra hasta el atún en tacos.
Para la receta de hoy necesitaremos los siguientes ingredientes:
– Lechuga iceberg
– Salmón ahumado
– Queso de cabra
– 2 latas de atún en aceite de oliva
– Pimienta
– Sal
– Aceite de oliva
– Vinagre de módena
Para empezar cortaremos la lechuga en tiras y la enjuagaremos bien. Tras esto la secamos para que quede más crujiente. Si no tenemos una centrifugadora de lechuga podemos usar papel higiénico para eliminar el agua. Después reservamos la lechuga en una ensaladera y añadimos el salmón ahumado a tiras.
Después añadimos el queso de cabra en medallones, reservando 2 o 3 medallones para decorar. Tras esto añadimos las dos latas de atún con el aceite de oliva escurrido. Después de esto ponemos en una sartén un poco de aceite de oliva, sal, pimienta y un chorro de vinagre de módena.
Una vez que se caliente la mezcla la vertemos sobre la ensalada y luego ponemos los medallones de queso de cabra que teníamos reservado sobre toda la ensalada, para decorar. La textura de todos los ingredientes queda excelente añadiéndole el aceite con un poco de calor.
