Ahora que es verano y apetecen platos más fríos que calientes es bueno tener un repertorio bastante amplio para que así no nos aburramos a la hora de comer. Lo bueno que tienen los platos fríos es que suelen ser muy fáciles y suelen ser también baratos, aunque no todos.
Hoy os voy a mostrar una de las recetas más sencillas y baratas que te puedas imaginar. Estoy seguro de que la mayoría de las cosas las tienes por casa y que ahora mismo puedes hacerla sin ningún tipo de problemas.
Los ingredientes que necesitamos son:
– Un puñado de pasta (la que más nos guste) por persona. Yo suelo echar un puñado extra para no quedarme corto.
– Un huevo duro por persona.
– Atún (una o dos latas, dependiendo de la cantidad que queramos)
– Mayonesa
– Maíz
– Jamón York o Pechuga de Pavo
– Aceite de oliva
– Sal y pimienta
Para empezar vamos a cocer la pasta según el fabricante. Es importante que no nos pasemos con la cocción, al dente está mucho mejor la pasta. En el agua donde cocemos la pasta echamos aceite, sal y pimienta. Si tenemos alguna especia a la que tengamos predilección también la podemos agregar sin ningún problema.
Una vez que tengamos la pasta cocida la echamos en un recipiente hondo y agregamos los huevos duros, cortados en dados, el maíz, el jamón york (o la pechuga de pavo, eso ya a nuestra elección) y el atún. Cuando tengamos todo mezclado agregamos la mayonesa y volvemos a mezclar de nuevo.
Tras esto, agregamos sal y pimienta y corregimos en el caso de habernos quedado cortos. Este plato les encanta a los niños pequeños, ya que la mayoría son amantes de la pasta. Si nos aventuramos un poco le podemos echar también una cucharada de café de mostaza, así tendrá un sabor distinto.
Os aseguro que este plato, acompañado de una buena copa de vino tinto, es perfecto para estos días de calor. No olvides meterlo una o dos horas antes en el refrigerador para que esté bien frío.