La descripción de este fantástico plato no podía ser otra que “una mezcla de intensos sabores que, a pesar de que en el paladar puedan parecer ofensivos, rebotan de un lado al otro de nuestra boca llenándola por completo”. Es una delicia, os lo aseguro, sobre todo para los amantes de los sabores intensos. La salsa de cebolla es muy fácil de preparar, aunque le añadiremos un punto distinto tanto para espesar como para que tenga un toque dulce extra.
Ingredientes necesarios para preparar las salchichas con salsa de cebolla y guisantes (para 2 personas):
- 4 salchichas frescas grandes
- 1 lata de guisantes
- 2 cebollas grandes
- 1 cucharadita de bovril
- 300 ml. de caldo de pollo
- 4 cucharadas de refresco de cola (con azúcar, no nos vale sin azúcar)
- 1 cucharada de cerveza
- Pimienta negra molida
- Sal
- Aceite de oliva
Cómo preparar las salchichas con salsa de cebolla y guisantes:
Esta receta es de lo más fácil, pero de lo más rica, así que comencemos poniendo al fuego una cazuela amplia y añadiendo un poco de aceite de oliva. Cortamos en juliana las cebollas y las añadimos a la cazuela con una pizca de sal. Cocinamos a fuego medio para que vayan soltando todo el agua y pochándose poco a poco.
Cuando las cebollas estén pochadas tenemos que añadir el caldo de pollo. Ponemos a fuego fuerte mientras removemos e incorporamos entonces el bovril, el refresco de cola y la cerveza. Salpimentamos al gusto. Cocinamos a fuego fuerte para que espese.
Una vez empiece a espesar la salsa, incorporamos los guisantes y removemos todo para que se integren. En una sartén aparte, doramos las salchichas y luego las incorporamos dentro de la salsa, agregando el jugo que hayan soltado en la sartén.
Cocinamos todo junto a fuego suave para que se vayan mezclando todos los sabores y servimos tras dejar reposar unos diez minutos con el calor residual, para que la salsa adquiera todo el espesor.
Foto orientativa: Alpha