En invierno la naranja nos ayuda con ese extraordinario aporte de vitamina C, tan fantástico en esta época del año para protegernos un poco de esos constipados y catarros, tan propios de la estación y tan molestos para nosotros. Eso sí, aunque la naranja es una fruta riquísima que no necesita más motivos para proporcionarnos un delicioso festín de sabor en boca, lo cierto es que darle una vuelta de tuerca y prepararla de otro modo también va a ser divertido para el paladar.
Ingredientes para la elaboración de la receta del postre cremoso de naranja:
- 5 láminas de gelatina neutra
- 2 yemas
- 2 naranjas
- Ralladura de limón
- 2 yogures griegos
- 1 brick pequeño de nata
- 100 gramos de azúcar
- Bolitas de chocolate
Cómo elaborar la receta del postre cremoso de naranja:
Vamos a comenzar el postre cremoso de naranja prestando toda nuestra atención a las protagonistas. Así que vamos a lavar las naranjas, las secamos y cortamos por la mitad y exprimimos una de ella. Acto seguido, limpiamos las dos mitades por dentro, retirando todo el pellejo y la pulpa que haya quedado, para que esos dos trozos nos sirvan de envases para el postre cremoso de naranja. A continuación, rallamos la otra naranja, con cuidado de no hacerlo en exceso, para que la ralladura no lleve pielecilla blanca.
En un bol, colocamos las yemas, el azúcar y el zumo de naranja y vamos batiendo con varillas, hasta que el azúcar quede completamente disuelta y el conjunto tenga una textura de cremita.
Llevamos la crema al baño maría y le incorporamos la ralladura de naranja y la de un limón, batiendo insistentemente hasta conseguir una textura aireada y espumosa. Apartamos del fuego.
Añadimos la gelatina, previamente remojada en agua fría y, mientras se disuelve, vamos montando la nata. Una vez lista, la incorporamos a la crema caliente, añadimos también el yogurt y vamos mezclando con varillas, hasta que obtengamos una deliciosa crema de naranja.
Ahora debemos poner la crema en una manga de pastelería, la cerramos y la dejamos reposar en el frigorífico durante un par de horitas. Finalmente, rellenamos las mitades de cáscaras que habíamos guardado y servimos espolvoreadas con el chocolate.
Imagen orientativa: Malkav
