Esta receta es una de esas que siempre nos gustan porque nos recuerda a nuestras madres, y como la cocina de una madre no hay nada en este mundo. En ocasiones podemos pasear por todos los rincones del mundo probando todas las recetas posibles y notar que lo que al final más nos gusta es el plato que nos hacía nuestra madre cuando llegábamos a casa después de un tiempo sin verla.
Para este nostálgico plato necesitaremos los siguientes ingredientes (para 4 personas):
– 2 o 3 papas grandes
– 1 cebolla grande
– 4 churrascos de pollo
– el zumo de dos naranjas
– aceite de oliva
– sal
– pimienta
La elaboración es la siguiente:
Pelamos las papas y las cortamos en redondo. Acto seguido pelamos también la cebolla y la cortamos en juliana. En una bandeja de horno que tenga algo de profundidad colocamos las papas y la cebolla para hacer una cama al pollo. Añadimos un poco de aceite de oliva, sal y pimienta y metemos al horno durante unos 15 minutos a 180 grados.
Mientras que se van haciendo un poco las papas quitamos la piel al churrasco de pollo si nos interesa. Lo podemos comer con piel, pero eso ya depende del gusto de cada uno. Cuando pasen los diez minutos ponemos el pollo sobre la cama de papas y cebolla, con la piel para abajo, y echamos por encima el zumo de las dos naranjas.
Cuando llegue unos 20 minutos a 180 grados lo sacamos y le damos la vuelta para que se dore bien por los dos lados. Si vemos que no está dorado lo dejamos un rato más para que se termine de hacer y listo.
